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El Ministerio de Trabajo abrió una investigación formal contra la reconocida cadena de supermercados D1, tras conocerse denuncias por presuntas prácticas de abuso laboral en distintas sedes del país. Según testimonios de empleados, se estarían presentando irregularidades como jornadas de hasta 12 horas sin pago de horas extras, sobrecarga de funciones y condiciones laborales que pondrían en riesgo la salud y la seguridad del personal.
Los trabajadores afirman que, en muchos casos, deben cumplir múltiples tareas al mismo tiempo, desde atención en caja y surtido de productos hasta labores de limpieza sin recibir compensación adicional ni pausas adecuadas. Estas quejas se suman a la preocupación por la falta de medidas de seguridad, que quedó en evidencia tras el asesinato de un trabajador durante un robo, mientras ejercía funciones como cajero.
El ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, calificó las denuncias como “alarmantes” y confirmó que se activaron los procesos de inspección para determinar si la cadena está violando la normatividad laboral vigente.
“Necesitamos que las tiendas D1 mejoren su infraestructura y bodegas porque esto afecta la salud y la vida de sus trabajadores, que fortalezca los canales internos de denuncia.” Expresó Funcionaria del Ministerio de Trabajo
Por su parte, D1 emitió un comunicado en el que niega cualquier irregularidad. La empresa sostiene que todos sus contratos cumplen con la legislación colombiana y acusó a los denunciantes de estar desinformando a la opinión pública.
El caso ha generado un amplio debate nacional, especialmente en medio del trámite de la reforma laboral en el Congreso. Sindicatos y organizaciones sociales advierten que este tipo de situaciones reflejan una realidad estructural en el sector del comercio, donde las condiciones laborales suelen ser precarias y poco supervisadas.
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