Aparentemente era una jornada de lunes como cualquier otra, todo transcurría de manera normal durante la faena de pesca que acostumbraba realizar Carlos Polanco todas las tardes en la ciénaga San Silvestre, en el sector conocido como La Represa, pero en esta ocasión, un imprevisto de salud ocasionó que cayera a las aguas y no saliera más, su cuerpo se sumergió en la profundidad y aún no ha sido hallado por los organismos de socorro ni por los pescadores de la zona.
En esta oportunidad, fue la muerte quien pescó a Carlos. Su vida fue arrebatada por La Represa, esa misma que con sus aguas impredecibles se ha llevado la existencia de cientos de hombres.
Hoy continuará la búsqueda por parte de Bomberos Voluntarios, Defensa Civil y, por supuesto, por los pescadores que siempre están disponibles para colaborar en estos casos dolorosos.
Carlos Polanco laboraba como cotero en la avenida 36, en el sector de La Locomotora y vivía en el asentamiento humano Villa de Dios, ubicado en la comuna 3 de la ciudad.