Visitas: 18
Un voraz incendio forestal se desató en la tarde del viernes 18 de julio de 2025 en la vía que comunica a Bucaramanga con el municipio de Matanza. La emergencia ambiental, que comenzó sobre las 2:00 p.m., se extendió rápidamente debido a las altas temperaturas, la vegetación seca y los fuertes vientos presentes en la zona.
Las llamas consumieron más de 100 hectáreas de bosque, pastizales y zonas de cultivo, generando una espesa columna de humo visible desde varios puntos de la región. Algunas fincas resultaron afectadas, aunque no se reportaron víctimas humanas ni viviendas destruidas.
La Oficina de Gestión del Riesgo de Santander activó una sala de crisis para atender la emergencia, mientras que cuerpos de bomberos de los municipios de Matanza, Rionegro, Piedecuesta, Suratá y la Policía Nacional, junto con voluntarios de la comunidad, trabajaron intensamente para controlar el fuego. El terreno montañoso y el difícil acceso a la zona complicaron las labores de extinción, las cuales se prolongaron hasta altas horas de la noche.

El coordinador de Gestión del Riesgo de Matanza, Óscar Durán, informó que se lograron controlar los focos más críticos, aunque algunos puntos seguían activos y eran monitoreados constantemente para evitar una nueva propagación.
Las autoridades recordaron a la comunidad la importancia de evitar quemas en temporada seca y reportar de inmediato cualquier conato de incendio. Se reiteró el llamado a la corresponsabilidad ambiental ante los efectos devastadores de estos eventos, que no solo afectan el ecosistema, sino también la seguridad y salud de las poblaciones rurales.
